Vinicius repite escándalo en Oviedo y revive sus controversias de Mestalla
A pesar de que la nueva temporada de la liga española acaba de comenzar, la situación de Vinicius Júnior sigue generando polémica. El Real Madrid logró una victoria contundente en el estadio Carlos Tartiere en su primer partido tras el regreso del Real Oviedo a la máxima categoría, imponiéndose por 0-3. Sin embargo, la atención se centró en el comportamiento del delantero brasileño, que solo jugó algo más de media hora tras empezar en el banquillo.
Xabi Alonso, entrenador del Real Madrid, decidió no incluir a Vinicius en el once inicial en Oviedo, después de que su actuación en el primer partido de la temporada ante Osasuna en el Santiago Bernabéu no le convenciera. El brasileño mostró signos de descontento desde el banquillo, siendo captado por las cámaras mientras bostezaba antes de entrar al campo.
En el minuto 63, Vinicius saltó al césped en sustitución de Rodrygo, siendo recibido por los abucheos de la afición local. Durante los 27 minutos que estuvo en el campo, su actitud fue criticada nuevamente: fue amonestado por el árbitro Ricardo de Burgos por simular una falta, mientras los seguidores rivales coreaban «tonto, tonto» desde las gradas.
La tensión aumentó cuando el jugador del Real Madrid respondió con gestos desafiantes y constantes protestas al colegiado. Las cámaras captaron cómo Vinicius se dirigía a la grada con las manos, repitiendo el gesto de «a Segunda», una referencia al descenso, que ya ha realizado en ocasiones anteriores.
No es la primera vez que Vinicius protagoniza este tipo de incidentes. En las dos últimas visitas del Real Madrid a Mestalla, en mayo de 2023 y enero de 2025, el brasileño fue expulsado tras enfrentamientos con la afición, repitiendo el mismo gesto. También en diciembre de 2024, durante el partido contra el Rayo Vallecano en Vallecas, volvió a hacer la señal.
Vinicius ha defendido su comportamiento a través de sus redes sociales, publicando una foto celebrando su gol frente al Oviedo, en la que señala con una mano su oreja y con la otra hacia la grada. En el mensaje que acompaña la imagen, el brasileño afirma: «Yo soy así», acompañado de varios emoticonos de guiños.
La actitud de Vinicius sigue generando debate entre los aficionados y medios de comunicación, pues mientras su rendimiento deportivo es indudable, sus gestos y provocaciones trascienden lo meramente futbolístico. La polémica parece acompañar al delantero en cada partido, reabriendo el debate sobre los límites entre la pasión y el respeto en el fútbol.




